REUNIÓN DE LAS FRATERNIDADES DE SOBRADO Y ARMENTEIRA

¡Cumpliendo Sueños …Oh noche que guiaste!

Monasterio de Armenteira. 19 octubre 2024

(IV visita hermanamiento)

El pasado sábado 19 octubre la Fraternidad de Sobrado dos Monxes recorre el camino hasta el Monasterio de Armenteira. Es la visita anual que hacemos entre las dos fraternidades y es algo muy esperado, que nos alegra mucho.

La visita entre Fraternidades surge en Ávila en 2019 en el marco de los Encuentros Regionales de Fraternidades Laicas Cistercienses de España. 

La primera visita fue el 21 de mayo 2022, siendo la Fraternidad de Laicos de Armenteira la que se desplaza al Monasterio de Sobrado. 

Ese mismo año, el 15 de octubre, la Fraternidad de Laicos de Sobrado se desplaza hasta la comarca del Salnés a disfrutar de un día de hermanamiento entre ambas fraternidades.

En el año 2023 se decide hacer una única visita anual alternando un año en un Monasterio y otro año en otro; así el 21 octubre de 2023 el encuentro tuvo lugar en el Monasterio de Sobrado y por tanto, para esta IV visita de hermanamiento le tocaba a la fraternidad de Sobrado viajar a la Armenteira, lo que sucedió, como dijimos antes, el pasado 19 de octubre 2024. 

Cinco afortunados compañeros de Sobrado se adelantaron para disfrutar del amor monástico y llegaron el viernes 18 para pasar la noche en la hospedería y compartir toda la liturgia y los Oficios Divinos con la Comunidad Monástica.

El sábado, un día muy esperado, fecundo y regalado de lluvia, nos hemos reunido 24 fraternos de Sobrado y 13 de Armenteira, 37 personas en total, fortaleciendo el vínculo ya iniciado por las Comunidades monásticas entre ambos monasterios.

Un grupo de personas posando delante de una pared de piedra

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El ambiente, la cercanía que nos ofrecen estas reuniones para compartir el carisma que nos une, nos confirma que es posible esta unión entre seguidores del Císter que somos, y que tanto nos gusta como la mejor elección para desarrollo personal y de autoconocimiento en la Fe cristiana. 

El programa se inició con un cálido café de bienvenida en el que se compartieron dulces traídos por diferentes fraternos.

Tras media hora de calurosos saludos y ponernos poco a poco al día, se iniciaba la actividad principal del día, centrada en el libro que las dos Fraternidades hemos trabajado en el curso pasado: ” Oh noche que guiaste! “, del monje de la comunidad monástica de Santa María de Sobrado, Carlos Maria Antunes.  Con tal motivo el Hno. Carlos Maria también viajó en esta ocasión para hablarnos sobre el germen del mismo. 

La Priora Ana inició la reunión formalmente dándonos la bienvenida a todos seguida de un momento de oración con el Salmo 114, un Salmo de acción de gracias, y un momento de silencio para prepararnos interiormente y sacar el mejor provecho de lo que estaba por venir.

Salmo 114

1Amo al Señor, porque escucha mi voz suplicante;
2porque inclina su oído hacia mí, el día que lo invoco.

3Me envolvían redes de muerte,
me alcanzaron los lazos del abismo,
caí en tristeza y angustia.

4Invoqué el nombre del Señor:
«Señor, salva mi vida».

5El Señor es benigno y justo, 

nuestro Dios es compasivo;

6el Señor guarda a los sencillos:
estando yo sin fuerzas me salvó.

7Alma mía, recobra tu calma,
que el Señor fue bueno contigo:

8arrancó mi alma de la muerte,
mis ojos de las lágrimas,
mis pies de la caída.

9Caminaré en presencia del Señor
en el país de la vida.

A continuación, el hermano Carlos Maria nos habló sobre el origen del libro, vivido desde el arraigo en una comunidad monástica enlazando su exposición con el versículo del Salmo 114  “estando yo sin fuerzas, me salvó“. El autor nos relató cómo este libro lo empezó antes a escribir en su interior, derivado de momentos de crisis y nos citó dos textos que le ayudaron en su día a decidir su vocación monástica: 

  • Acoger nuestra humanidad” de Jean Vanier. De este libro Carlos Maria destaca que la genialidad habita al lado de la miseria y que Dios está aquí; no está Él arriba y yo abajo.
  • A merced de su gracia” de André Louf. De este libro Carlos Maria destaca que el lugar de la tentación es el lugar de la salvación, así como  lo necesario que es permanecer junto a las ruinas de uno mismo sin hacer nada.

Carlos Maria nos recordó que S. Bernardo dice “si quieres contemplar a Dios, baja, baja”.  Sentir la llamada a bajar, encontrarme con lo que soy, estoy en camino aún. El Espíritu nos llama desde el pecado, pero no es fácil bajar. Vivo aún en la carne.

El Padre le pide bajar a Jesús. Beber en el pozo de tu propia sed, no buscar agua sino la sed. Dios está más en mi sed que en mis hipotéticos sueños.

La Priora Ana se unió también a la disertación sobre el libro aportando la experiencia en el monasterio y la conversión dentro del monasterio. ¡Qué bendición poder abrirse uno a su pobreza!

Posteriormente las dos Fraternidades nos distribuimos en 5 grupos integrando miembros de ambas Fraternidades para reflexionar sobre el libro, siempre desde un enfoque personal, y trabajando los siguientes 4 aspectos: ¿Qué luz aportó el libro en mi vida?; Cómo influyó en mi desarrollo y experiencia personal?; ¿Qué cosas buenas aportó el trabajarlo dentro de la Fraternidad?; ¿En qué me ayudó la lectura de este libro?.

La posterior puesta en común nos dejó frases como las siguientes: 

  • Cuando las cosas nos van bien, creemos que no necesitamos a Dios.
  • Al asumir la propia vulnerabilidad, entonces aceptamos la de los otros. 
  • Autoconocimiento a la luz del conocimiento de Jesús. Darle más cabida en mi vida a la vida y muerte de Jesús, me permite conocerlo más y me conozco más. 
  • Cuando vivimos separados de nosotros mismos no podemos encontrarnos con el otro.
  • Soy vulnerable. Dios acoge mi pobreza y acepta mis ruinas.
  • La Fraternidad es un gozo; ayuda a ver que somos barro y en medio de esas grietas del barro sale la luz.
  • Frase del Prior Salvador: “Vosotros sois el libro más sagrado”. Somos el lugar teológico donde Dios se nos va a revelar.
  • La tierra Sagrada es la vulnerabilidad y es la experiencia. No poder perdonar al otro, sentirse perdonado toda la vida, vivir en la gratuidad. Él está en la carne…..  de lo inhóspito al encuentro. 
  • Dualidad en el libro:  niebla y faro.
  • El libro nos acerca a lo humano. La humildad encuentra la paz. Nos toca habitar el tiempo de hoy. El encuentro con la vulnerabilidad puede concernir a quien cree y a quien no cree.
  • Asumir la vulnerabilidad, y el medio que ayuda es la oración, donde cada uno encuentra la manera de expresarlo.

Tras las reflexiones compartidas nos unimos a la Comunidad monástica en la capilla para la Liturgia de Sexta. Un verdadero deleite.

Sintiéndonos hermanos y en total sintonía, disfrutamos de una comida de confraternidad en un ala de claustro alto donde no faltaron los dulces traídos por los fraternos de muy deferentes lugares, desde Asturias, Canarias, Aragón, Portugal y Galicia.

Un grupo de personas sentadas alrededor de mesa con comida

Descripción generada automáticamenteUn grupo de personas sentadas alrededor de una mesa

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Un grupo de personas sentadas alrededor de una mesa

Descripción generada automáticamenteUn grupo de personas sentadas alrededor de una mesa de restaurante

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Tras la comida, nos volvimos a reunir en la sala de reuniones para, por parte de los fraternos (4 de Sobrado y 3 de Armenteira) que habían asistido al reciente Encuentro Regional de España de las Fraternidades Laicas Cistercienses, celebrado en el Monasterio de Santa María de Huerta, Soria, en junio 2024, poner en común a las dos Fraternidades la programación de dicho Encuentro, el desarrollo y algunas reflexiones sobre el mismo. 

La Fraternidad de Armenteira agradece la formación y la acogida que nos brinda la Asociación Internacional de Fraternidades Laicas Cistercienses y seguirá, junto con la Comunidad, su proceso de  crecimiento, discernimiento y deseada madurez para, si así lo guía el Espíritu, unirse algún día a la Asociación.

La jornada de confraternidad tuvo su colofón con una Eucaristía oficiada por el hermano Carlos Maria en la que se leyeron unas preces preparadas por parte de las 2 fraternidades. 

Una sala de estar

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Con la fertilidad del ambiente lluvioso que nos acompañó toda la jornada, y tras calurosas despedidas, agradecimos a la Comunidad Cisterciense de Armenteira por la fantástica acogida y nos fuimos despidiendo deseándonos un buen curso fraterno 2024-2025 y aguardando con ilusión el nuevo encuentro.